
Se presenta a continuación una actividad creativa denominada “Manchas”, diseñada para explorar y desarrollar la creatividad de los alumnos a través de la abstracción y la representación. Esta actividad se desarrolla en tres fases y es una excelente manera de fomentar tanto la expresión individual como la interpretación artística.
Fase 1: Creación de Manchas
La primera etapa de esta actividad consiste en la creación libre de manchas sobre papel. Los alumnos recibirán hojas de papel y materiales como acuarelas, tintas o cualquier otro medio que permita la creación de manchas fluidas y orgánicas. La única condición es que estas manchas no deben formar ninguna figura o representación reconocible al momento de su creación. El objetivo es fomentar la espontaneidad y evitar las limitaciones que a veces impone el intento de representar algo concreto desde el principio. Esta fase es fundamental para que los estudiantes se desinhiban y experimenten con los colores y las formas de manera libre.
Fase 2: Transformación de Manchas en Representaciones
Una vez que los alumnos han completado sus manchas abstractas, se les desafía a transformar estas creaciones en una representación de algo real. Aquí es donde la actividad se vuelve particularmente interesante. Los estudiantes deben observar sus manchas y decidir cómo pueden convertirlas en una parte integral de una composición más estructurada.
En algunos casos, las manchas pueden convertirse en los colores de objetos específicos, como el verdor de un paisaje o el azul del cielo; en otros, pueden actuar como fondos para escenas de actividades o incluso convertirse en elementos centrales de la obra, como el pelaje de un animal o las sombras en una escena urbana. Esta fase no solo desafía a los estudiantes a utilizar su imaginación y habilidades de percepción visual, sino que también les enseña sobre la importancia de la integración y la reinterpretación en el arte.
Fase 3: Presentación y Explicación
La última fase de “Manchas” es la presentación. Cada estudiante tendrá la oportunidad de proyectar su obra en la televisión del aula y compartir con el resto de la clase lo que ha querido representar. Esta fase es crucial para desarrollar habilidades de comunicación y crítica artística. Los estudiantes deberán explicar no solo lo que han representado, sino también las técnicas utilizadas y cómo integraron las manchas originales en sus creaciones finales. Este es un momento de reflexión y aprendizaje, donde cada estudiante puede ver cómo sus compañeros han resuelto el mismo desafío de manera diferente.